—¿Qué pasa cuando llenas una botella hasta arriba y le das presión?.
—Explota, simplemente explota.
Recuerdo ese diálogo con mi padre cuando era una niña y estaba en plena fase de preguntarme el por qué de todo, pero... últimamente me identifico con ese caso.
Todos me piden obligan a dar lo mejor de mi, me comparan constantemente con otras personas, pero ya no puedo más... yo soy yo, soy esa chica aparentemente extrovertida pero con mil muros en su interior, soy esa chica aparentemente segura pero con problemas de autoestima en el pasado, soy esa chica que aparentemente hace lo que quiere, pero en realidad sólo hace lo que quieren que haga, soy esa chica que sonríe por las mañanas y llora por las noches, soy esa chica que ha aprendido a sobrevivir, soy esa chica que se mata a esforzarse por contentar a los demás, pero... no, ya no puedo más, estoy harta.
Siento que rompo todo lo valioso que tengo, que el estrés de esta semana se ha cebado conmigo y sobretodo siento cómo me he portado contigo, sé que tu no tienes la culpa de nada, pero entiéndeme... ¿Cómo te tomarías que yo apenas te hablase en una semana?, creo que no soy la clase de chica que agobia, y me preocupo, porque no sé cual es el límite, no sé cuando debo de enfadarme y cuando debo ser comprensiva, sé que soy realmente bestia, sé que puedo decir en un solo minuto cosas de las que me estaré arrepintiendo durante días, y sobretodo sé que estarás enfadado y con motivos, pero entiéndeme... no soy de esas que van detrás de un chico, soy un espejo, si tú no me hablas yo no lo haré, y soy consciente de que mi orgullo a veces lo fastidia todo, pero estoy adaptándome, a confiar en alguien de nuevo, a no pensar cómo una sola persona sino como dos, a querer a alguien de nuevo...
Lo siento, no soy de esas que piden perdón, sencillamente no sé cómo pedir disculpas cuando mi bocaza fastidia las cosas, pero es cierto... lo siento mucho, estos días estaba mal y te necesitaba, necesitaba a mi novio, el que dijo que siempre estaría para mi, y empecé a rayarme muchísimo, porque tú no me decías que te pasaba y yo pensaba que te habías cansado de mi y más posibilidades que van por ese camino.
Perdona, por todas las cosas que te dije, por haber sido tan increíblemente egoísta por haberme comportado como una cría, queda claro que yo soy mayor que tú... pero aquí quien demuestra poseer madurez eres tú.
Últimamente siento que le fallo a todo el mundo, y lo siento, de veras.
- 22:55
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