Sabes cuando es hora de cerrar un capitulo de tu vida, de cerrar ese libro, colocarlo en una estantería y empezar a vivir otra historia, totalmente diferente. Pues bien, creo que ya ha sido hora de cerrar ese libro y dejarlo olvidado en cualquier rincón donde coja polvo.
Tira todo aquello que te recuerde a él, esa camisa que tanto te gustaba verle puesta y que un día se dejó en tu casa, esas fotos en las que aparecíais tan felices que jamás esperarías que un día esto se acabaría, ese libro que un día te prestó, y por el que no ha vuelto. Tíralo, por que es hora de empezar de cero, realmente, cuando te das cuenta de que solo tu puedes ayudarte a olvidarle, es cuando estás preparada, y yo, ya lo estoy.
Parece que es verdad eso que dicen, que el amor no entiende de cálculos, ni de horarios, aparece cuando quiere, puede presentarse en el momento más inoportuno, cuando estás locamente enamorado de esa persona, de tu persona, y entonces, entra en acción, llega otra persona, que te hace replantearte seriamente tu presente y tu futuro. En ocasiones, llega en el momento exacto, cuando estás listo para ser amado, cuando la otra persona te entiende, y quiere estar a tu lado.
Este es mi momento, mi propio instante, me gusta, el hablar durante horas con una persona, sin cansarme, poder desgranar poco a poco partes de mi vida, para dejar que él entre en ella.
No se que clase de historia viviré, no se si quiera si esta amistad va a conducirnos a ambos hacia algo más, realmente... hay tantas cosas que me gustaría saber, pero, por otra parte, esa curiosidad mía nunca me ha llevado por buen camino, prefiero conocer lo que es bueno para mí, y obviar aquello que carece de interés.
No se cual va a ser mi futuro, no se con quien lo voy a compartir, no se si para entonces habré cumplido todos estos sueños que estoy forjando ahora, pero se algo, y es que ningún  futuro está escrito, hay que aprender a jugar tus cartas, no quedarse junto a la primera persona que pase, por que aveces es mejor estar sentado en ese banco, esperando hasta que llega esa persona que te hace levantarte de un impulso.