Parece que fue ayer cuando todo empezó... un día cualquiera, pero que irremediablemente ha pasado a convertirse en una fecha, en un día especial, en un día con significado.
Debo confesar que has cambiado mucho en mí, que has conseguido que deje de ver la vida de forma materialista, has conseguido que crea en la bondad de los demás, has conseguido... hacer de mí una mejor persona, por que... es cierto, el secreto de la felicidad es el amor, amor... un sentimiento que es capaz de encauzar positivamente la vida de muchos, que es capaz de cambiar el estado de ánimo de quienes lo tienen corriendo por sus venas.
Somos como dos piezas de puzzle, no, no somos iguales, pero si nos hemos encontrado entre todas las piezas que hay, por casualidad, y... cosas del destino, ahora me cuesta imaginarme sin ti.
Cuando me preguntan que es lo que más me gusta de ti... no puedo responder, no puedo decir una sola cosa, son pequeñas cosas que en su conjunto forman una montaña con más altitud que el monte Everest.
Eres lo más dulce del universo.
Me encanta que hablemos, me quiera enfadar y me digas algo dulce, extremadamente dulce, que me desconcierte. Me encantan las horas, los días, si son junto a ti.
Este... precisamente no ha sido mi año, pero, ahora todo cambia, este es el mejor año, por que has aparecido tú.
Y... me encantan esos besos, en los que siento pequeñas y placenteras descargas.
Es... mágico, el acercarme cada vez más a ti, ver como te acercas lentamente, inclinar levemente la cabeza, ver como sonríes, observarnos con miradas cómplices, suspirar y prepararnos para el mejor beso del día.
Eres lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo, gracias a ti he aprendido una lección: 'Reserva tu corazón para aquel que cuide de ti'. Gracias, por estar aquí, por ser mío, por hacerme feliz. Gracias, por ser tú.